Soy alguien que es normal. Tengo todo normal. En el instituto soy alguien normal, en la calle alguien normal. Soy alguien tranquilo, que disfruta la vida a sorbitos pequeños, que sino te empachas y la aborreces. Soy uno de esos que vive por y para sus amigos, aunque a veces se equivoque, como toda la gente normal. Soy de esos que se mete 457856824567 canciones en el móvil y que luego sólo escucha la misma una y otra vez, porque se identifica totalmente con ella. Soy de esos que aman la noche, que le aburren escuchar a la gente que va de flipada y que es alérgico a la chusma. Soy de los que se cansan de las cosas. Soy alguien que se agobia, que le asusta envejecer y que le asustan muchísimas cosas más. Alguien que es demasiado caprichoso en todo, menos en el amor. Soy uno de esos que sólo piensa en ella. Que le dedica tal vez todo el día a tenerla en la cabeza. Soy alguien normal que cuando se acuesta en la cama le cuesta dormirse porque se pone a pensar en todas las cosas importantes. En definitiva, soy alguien normal entre los normales, que no sobresale en nada de ningún tipo, sólo en quererla más que a nada. 

Te prometo hacerte la chica más feliz del mundo.

Te prometo la historia más bonita que jamás se escribió. Te prometo miles de lágrimas de felicidad, millones de sonrisas e incontables momentos que jamás se te olvidarán. Te prometo ser el rayo de sol que amanezca cada día en tu ventana, y te haga cada día más feliz. Te prometo pasear horas y horas, y estar los dos juntos abrazados. Te prometo no irme nunca, pase lo que pase. Te prometo no hacerte daño. Te prometo hacerte la reina de mis cuentos, de mi castillo, de nuestro reino. Y que nadie nos moleste. Nosotros somos los que manejamos todo, porque nada nos puede parar, nada puede remediar lo que se siente. Nadie puede intentar creerse que no siente lo que en realidad sabe que existe, y que es un sentimiento que te desgarra si lo dejas dentro. Te prometo escribir millones de historias en los que los dos seamos los protagonistas. De esas que están locamente enamorados, que no paran de hacer tonterías juntos, que no paran de amarse. De esos que acaban con un ``vivieron felices, y comieron perdices´´.